Se trata de una actuación que lleva a cabo la Diputación Provincial de Castellón, y pretende evitar una plaga importante de mosquitos, dado que con las lluvias registradas en las últimas semanas se ha detectado un incremento considerable de larvas, principalmente en la zona de la finca de El Pou, una de las más conflictivas a la hora de realizar los tratamientos de control de mosquitos.
Los productos que se van a utilizar son inocuos para las personas y fauna, porque solo afecta a las larvas de mosquitos y mosca negra. Se trata de larvicidas biológicos que también se utilizan en los tratamientos terrestres, y que no son perjudiciales para el ser humano ni para los animales.