La Declaración requiere al gobierno solicitar el aumento del número de días de pesca, dado que con 133 jornadas ha sido posible aumentar un 25 % las capturas, exige mejorar la transparencia a la hora de definir los criterios para seguir pescando, ya que la captura de cerca de 200 especies no puede depender de los criterios que se fijan para una sola, tal y como sucede en la actualidad con la merluza. Insta a mejorar y ampliar los criterios para determinar cuál es el stock real de pesca disponible de todo el grupo de diferentes especies, pide que se tenga en cuenta al sector a la hora de tomar decisiones importantes, y que se haga en tiempo y forma, que los márgenes de cambio sean intervalos reducidos, con cambios máximos del 5 al 10% anual y que no sean como en la actualidad con una reducción del 70%, aplazándose el horizonte para alcanzar el rendimiento máximo sostenible más allá del 2030, y que se elimine la obligación de desembarque del pescado no apto para su comercialización; finalmente pretende que el asesoramiento interno de la comisión de pesca sobre el mediterráneo se lleve a cabo por científicos especializados en el mediterráneo.
Esta Declaración Institucional en defensa del sector responde a la situación crítica en la que éste se encuentra tras las últimas decisiones adoptadas por el Consejo de la Unión Europea que reduce los días de pesca a tan sólo 27 al año. "Esta medida hace inviable la supervivencia del sector pesquero en la Comunidad Valenciana, que genera un gran número de puestos de trabajo directos e indirectos, siendo su valor social incalculable" indica el documento.
"La pesca mediterránea, además de ser un importante activo económico, turístico, cultural y gastronómico de nuestro territorio, tiene también un importante valor ecológico y medioambiental en nuestro mar, ya que sólo el año pasado los pescadores de la Comunitat Valenciana recogieron 150.000 toneladas de basura, principalmente plástico, del mar mediterráneo" concluye la Declaración.