El PSOE municipal ha denunciado las “irregularidades” cometidas por el Ayuntamiento de Badajoz con la gestión del Centro de Protección Animal de la ciudad y la recogida de animales en la vía pública.
Tras el anuncio de que solamente una empresa se había presentado al concurso para gestionar el centro de protección animal, comúnmente conocido como perrera municipal, el ayuntamiento no prorrogó el contrato de ese servicio y desde el pasado mes de octubre las instalaciones se han estado gestionando directamente desde la Concejalía de Protección Animal, cuya responsable es la concejala Elena Salgado a la que la portavoz socialista Silvia González ha mencionado en su intervención en una rueda de prensa para denunciar esta situación: "La señora Salgado dice que el Servicio de Protección Animal solo se atienden casos urgentes, ante esa afirmación me gustaría saber, ¿qué se considera caso urgente? ¿quién o quiénes determinan esa urgencia? ¿hay un comité habilitado para ello? y cuando un caso es determinado como urgente, ¿quién es el encargado de dar la respuesta? Voy a poner un ejemplo concreto: el hombre que fue atacado por dos perros en la pista del semillero de empresas de Gévora, se comunicó que los animales habían sido intervenidos por los servicios veterinarios del Ayuntamiento de Badajoz y puestos en cuarentena, ¿con qué servicios veterinarios cuenta actualmente el consistorio? ¿los tenemos o no?", se pregunta González.
El nuevo contrato se licitó por primera vez con un presupuesto de 48.000 euros por un periodo de 5 meses. El concurso quedó desierto y se volvió a licitar, elevando la cantidad a 72.000 euros por cuatro meses. Este último procedimiento se ha tramitado como "super-simplificado" por la urgencia de volver a todos los servicios, pues desde hace tres meses solo se atienden «casos urgentes» de abandonos y animales heridos y no se recogen los que aparecen muertos de la vía pública, tarea que se ha derivado temporalmente al servicio de Limpieza. Una situación que desde el grupo municipal socialista no entienden, así lo ha expresado Silvia González: "Es que no lo entendemos, querríamos al menos un argumento para saber en qué se apoyan para haber tomado esa decisión. Lo normal es hacer un estudio de mercado y después sacar una licitación o unos precios acordes a ese estudio de mercado, uno ve más o menos por dónde se mueven los precios, se habla con distintas empresas, etc. pero sacar una licitación que quede desierta y de golpe volver a sacarla y además en poco tiempo porque la segunda salió el 26 de diciembre, y de golpe se duplica, y además ves que la concesión de los cuatro años anteriores ahora es más del doble y las condiciones siguen siendo las mismas", según la concejala socialista.