"No permitiré que ningún gobierno socialista apoye este proyecto". Aunque confía en las palabras de Guillermo Fernández Vara que condiciona la mina a la decisión de ayuntamiento de Cáceres y al anuncio de que no utilizará ninguna figura, como la de Proyecto de Interés Regional, y porque Salaya cree que es imposible que a la empresa se le conceda la declaración de impacto ambiental. Salaya afirma que la empresa Infinty Lithium está enredando porque sabe que en cuanto presente esa declaración el proyecto estará finiquitado.