El delegado territorial de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en Extremadura, Marcelino Núñez, ha hecho público este jueves el balance climático de la pasada estación del invierno y las previsiones para la primavera, que ha comenzado este 20 de marzo a las 10,02 horas.
En este sentido, ha señalado que el pasado trimestre ha sido húmedo en cuanto a las precipitaciones registradas en la región y, en concreto, el 11º más húmedo del periodo de referencia (1991-2020), en la región, así como el quinto más cálido en temperaturas del citado periodo.
De cara a la primavera en Extremadura, Núñez ha detallado que hay una mayor probabilidad de que la temperatura media sea más cálida que los valores de referencia, mientras que en cuanto a las precipitaciones no hay una señal "clara" entre las diferentes fuentes de información, por lo que la probabilidad de los terciles (húmedo, normal, seco) es la climatológica en toda España.
Asimismo, este jueves sigue activo el aviso amarillo en el norte de Cáceres por lluvia y viento y se esperan cielos nubosos o precipitaciones que, en el norte pueden ser "importantes", pero "ya no empiezan a ser tan generalizadas". El viernes estarán activos los avisos amarillo en el norte de Cáceres y Las Villuercas, por lluvia y viento fuerte, pero de cara a una semana las lluvias "deben haber desaparecido" dado que la tendencia es que "el tren de borrascas se corta por fin".
PRECIPITACIONES
En concreto, las precipitaciones medias para toda la región durante el invierno han sido de 191,9 litros por metro cuadrado, superiores al valor de referencia para este trimestre, 156,3 litros por metro cuadrado, por lo que se ha tenido, por tanto y en promedio para toda Extremadura, un importante superávit de 35,6 litros por metro cuadrado, que supone que, en este trimestre las precipitaciones han representado un 123 por ciento del valor de referencia.
Así, el trimestre entre diciembre y febrero ha sido el 11º más húmedo del periodo de referencia (1991-2020) en Extremadura, al hilo de lo cual ha especificado que diciembre fue muy seco, enero muy húmedo y febrero seco, y que ha sido un invierno meteorológico húmedo, con una distribución muy parecida en ambas provincias. En el caso de este mes de marzo, lo ha calificado de muy húmedo, con precipitaciones muy por encima de la media a fecha del pasado día 18.
AÑO HIDROLÓGICO Y TEMPERATURAS
Mientras y respecto al balance de las precipitaciones acumuladas en lo que se lleva de año hidrológico, desde octubre de 2024 hasta febrero de 2025, ha sido clasificado también por Núñez como húmedo.
En este sentido, ha destacado que se han registrado de media 390,9 litros por metro cuadrado, cuando el valor de referencia es de 318,6 litros por metro cuadrado, de manera que las precipitaciones registradas en el periodo citado han supuesto un superávit de 72,3 litros por metro cuadrado.
La precipitación de lo que se lleva de año hidrológico ha supuesto así un 123 por ciento del valor de referencia. "No es para volverse locos de que es un año muy lluvioso", pero ya se llevan dos o tres años con este superávit "relativamente importante", que "no está mal" y que "poco a poco" hace que las reservas vayan aumentando, ha subrayado.
Respecto a las temperaturas, ha explicado que en Extremadura la media del trimestre entre diciembre y febrero ha sido de 9,6 grados, mientras que la temperatura media de referencia es de 8,6 grados, lo que significa que se ha tenido una anomalía positiva de 1 grado respecto al valor medio, que permite clasificarlo como muy cálido en cuanto a temperaturas y, en concreto, como el 5º más cálido del periodo de referencia (1991-2020), con diciembre cálido, enero muy cálido y febrero muy cálido.
Finalmente y sobre las situaciones más notables a destacar de este invierno 2024-2025, ha resaltado las diferentes borrascas de alto impacto, entre ellas Garoé, del 20 al 22 de enero, y que en Extremadura provocó avisos por lluvias en ambas provincias; o Herminia, el 26 y 27 de enero y cuyos principales impactos asociados al temporal de la borrasca estuvieron causados por las rachas de viento.