Un hombre de 32 años ha sido detenido tras emprender una peligrosa huida por las calles de Navalmoral de la Mata que inició con el fin de despistar a los agentes de la Guardia Civil que le dieron el alto después de adelantarles por línea continua cuando iban en un coche camuflado.
Por este motivo, ha sido detenido gracias a una actuación conjunta de Guardia Civil y Policía Local por los delitos de conducción temeraria, resistencia, desobediencia y atentado a los agentes de la autoridad.
Los hechos tuvieron lugar en la madrugada de este pasado martes, cuando agentes de la Guardia Civil patrullaban por una carretera próxima a esta localidad con un vehículo camuflado, fueron adelantados en línea continua por otro coche.
Al intentar detener al conductor mediante señales acústicas y luminosas para notificarle la infracción, este hizo caso omiso y aumentó la velocidad, poniendo en peligro la seguridad vial al circular de forma temeraria por la vía y por el casco urbano, donde circuló por rotondas "a gran velocidad y calles en dirección contraria", señala la Guardia Civil en una nota de prensa.
El seguimiento del vehículo continuó, informando de lo ocurrido a las patrullas de Policía Local que se encontraban de servicio, quienes bloquearon el paso al vehículo en una rotonda. Sin embargo, el conductor intentó evadir la detención maniobrando bruscamente hacía atrás e impactando contra uno de los vehículos oficiales, siendo finalmente interceptado y reducido por los agentes a pesar de su "resistencia activa".
El detenido fue trasladado a dependencias oficiales de la Guardia Civil para la instrucción de las diligencias policiales correspondientes. Posteriormente, fue puesto a disposición de la autoridad judicial competente en Navalmoral de la Mata