La asociación ecologista SEO/BirdLife ha identificado en Extremadura y Aragón más de tres mil kilómetros de vallados y tendidos eléctricos potencialmente peligrosos para aves agroesteparias.
En casos como la avutarda euroasiática, las colisiones con tendidos eléctricos representan hasta el 64% de los casos de mortalidad registrados en España, según datos que maneja la organización.
De hecho, esta especie tiene "fuertes declives de población" en ambas comunidades autónomas, que recientemente ha pasado a situación de 'en Peligro a nivel mundial', según la Lista Roja de la UICN.
Según explican, las aves que viven en áreas agrícolas han experimentado un fuerte descenso en sus poblaciones, principalmente debido a las transformaciones que ha sufrido la agricultura en general en España. Sin embargo, otro problema importante es la colisión de estas aves con estructuras como los tendidos eléctricos o vallados, lo que causa una mortalidad significativa en numerosas especies.
Para revertir esta situación, SEO/Birdlife ha puesto en marcha un proyecto que pretende "entender mejor y mitigar estos impactos en las aves". "Muchos tendidos eléctricos carecen de señalización efectiva, lo que provoca las colisiones de las aves. También se investiga cómo hacer menos peligrosas las alambradas de pinchos, pues también son una amenaza importante para las aves", señala Jesús Martínez, técnico del proyecto Life Agroestepas Ibéricas.
Además, se explorarán combinaciones de vallas mínimas de pinchos o vallas electrificadas en la ganadería para evitar fugas y accidentes, al tiempo que se minimiza el impacto en las aves esteparias.
SEO/BirdLife destaca la importancia de la cartografía de riesgo para planificar acciones de mitigación de accidentes de fauna con estas infraestructuras. Identificar áreas de mayor probabilidad de colisión y comprender la distribución de infraestructuras lineales, como vallas y tendidos eléctricos, es "crucial para tomar medidas efectivas que eviten la muerte de aves amenazadas".
Dentro del proyecto LIFE Agroestepas Ibéricas se han recorrido y caracterizado y se está analizando la peligrosidad de estas infraestructuras. El proyecto, financiado por la Unión Europea, tiene entre sus objetivos reducir la mortalidad no natural de especies como el sisón común y la avutarda euroasiática en la Red Natura 2000.
El proyecto LIFE Agroestepas Ibéricas busca enfoques agrarios sostenibles para la conservación de especies y hábitats agroesteparios en Red Natura 2000, demostrando que "agricultores, ganaderos y conservacionistas pueden trabajar juntos por el futuro de estos sistemas y las aves protegidas que tienen en ellos sus últimos refugios en Europa".
Además, se pretende ofrecer a la administración un modelo consensuado de buenas prácticas en ambientes agroesteparios para ser integrado en las políticas de agricultura y desarrollo rural, haciendo compatible la gestión agraria con la biodiversidad.