Extremadura registró en 2023 la tasa de delitos de odio más baja del país, con 2 casos por cada 100.000 habitantes, al haber investigado las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado 21 hechos conocidos de este tipo en total, cifra similar a la de 2022 en la región y por debajo de la media nacional de 4,72 casos.
Así consta en el informe anual del Ministerio del Interior sobre el "II Plan de Acción de Lucha contra Delitos de Odio 2022-2024" que el titular de este departamento Fernando Grande-Marlaska ha presentado durante la cuarta reunión de la Comisión de Seguimiento de dicho plan.
Respecto al anterior informe de 2022, la región extremeña se ve superada en número de casos por cada 100.000 habitantes por La Rioja, la Región de Murcia y Ceuta, colocándose como el territorio con menor tasa de delitos, infracciones e incidentes odio, seguido de Aragón (3,06) y Murcia (3,16)
Los delitos de odio por ideología fueron los más numerosos en Extremadura, con 10 (el doble que hace un año) mientras que se registraron 5 infracciones penales por racismo y xenofobia (tres menos) y tres por orientación sexual y de género (dos menos).
Un hecho discriminatorio por sexo o género y otro caso por antigitanismo, además de un tercero englobado en infracción administrativa y resto de incidentes, completan los casos en la región. Desaparecen los casos por creencias religiosas, que en 2022 fueron dos.
En total se contabilizaron 18 víctimas, la mayoría por ideología (7) y racismo o xenofobia (5), seguida por orientación sexual o de género (3).
