Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura ha realizado una primera estimación de producción y superficie de esta cosecha de cereales en la región, que supone una reducción del 55,7 por ciento respecto a la campaña del año pasado.
En concreto, se prevé una cosecha de cereales de 336.805 toneladas frente a las 760.402 toneladas de cereales producidas en la anterior campaña. En cuanto a superficie, este año se destinan a cereales 210.110 hectáreas en Extremadura.
Según expone la organización en nota de prensa, la caída de la producción debida a la sequía padecida pone de manifiesto la necesidad de buscar nuevas técnicas y soluciones que mejoren el rendimiento de los cultivos y hagan frente a los desafíos del cambio climático. La investigación, la mejora genética y las nuevas variedades, son las "claves" que tiene el sector para mejorar sus rendimientos, así como unas políticas adecuadas de gestión del agua, que garanticen el acceso sostenible a recursos hídricos adecuados para la agricultura.
Una cosecha corta supone, ha explicado, "un gran reto de logística" para el sector cerealista, que "debe garantizar el normal y necesario" suministro a lo largo de toda la campaña para cubrir las necesidades de consumo de la importante cabaña ganadera nacional.
La producción de maíz en Extremadura se estima en 198.000 toneladas, destinándose a este cultivo durante esta campaña 18.000 hectáreas, según estas mismas estimaciones de Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura. De este modo, Extremadura baja a la cuarta posición como región productora de maíz de España.
Respecto a los cereales de invierno, destaca principalmente el de trigo blando, con una previsión de 79.000 toneladas, mientras que la producción de trigo duro es de 5.360 toneladas, según estas estimaciones de Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura. Junto a ello, las previsiones apuntan a una producción de 32.585 toneladas de cebada, de 8.500 toneladas de avena y de 12.460 toneladas de triticale.
A nivel nacional, la primera estimación de la cosecha de cereales apunta a 9 millones de toneladas, lo que supone un 48,5 por ciento menos con respecto a la pasada campaña. Por cultivos, en trigo blando se alcanzarán los 5,05 millones de toneladas, en cebada 2,8 millones de toneladas, en maíz 2 millones de toneladas, en trigo duro 318.305 toneladas, en avena 123.204 toneladas, centeno con 32.135 y en triticale y otros con 108.509 toneladas.
El rendimiento medio estimado en esta campaña es de 1,66 toneladas por hectárea, precisan las mismas fuentes, para las que hay que destacar el "elevado" volumen de hectáreas que no se cosecharán por bajo rendimiento, porque cultivos como la avena, el centeno y los triticales se han utilizado para aprovechamiento ganadero.