El reciclaje de envases domésticos de plástico, metal, brik, papel y cartón, gestionados por la organización sin ánimo de lucro Ecoembes, creció un 1,6 por ciento el año pasado en Extremadura, un 38 por ciento si se compara con hace cinco años.
En total se reciclaron 33.867 toneladas de estos envases, que se convirtieron en nueva materia prima con la que fabricar productos como textiles, tuberías, mobiliario urbano o nuevos envases, ha informado Ecoembes.
En concreto, el 68 por ciento de estas toneladas proceden de la recogida separada en los más de 22.358 contenedores amarillos y azules que hay en las calles y los 1.145 puntos de reciclaje situados en lugares de gran afluencia.
Por tipo de material, del total de toneladas de envases domésticos reciclados en la región, 15.570 toneladas corresponden a envases plásticos (un 7,2 % más respecto al año anterior), 12.441 a papel y cartón (-0,3 %) y 5.855 a metálicos (-7,9 %).
De esta cantidad, el 68 % de las toneladas recicladas provienen de la recogida separada, que incluye tanto la recogida selectiva municipal (46,1 %) -a través de los contenedores amarillos y azules de la calle- como la que se realiza con gestión privada (22 %) a través de puntos de reciclaje situados en lugares de gran afluencia de público como centros comerciales, entre otros.
El 32 % restante se consiguió recuperar de las plantas de residuos que tratan la fracción resto, donde llegan todo tipo de residuos sin separar.
Del total de toneladas de envases domésticos recicladas en Extremadura en 2023, el 46,1 % (15.620 toneladas) procede de lo que los ciudadanos separan en sus hogares y depositan en alguno de los 11.835 contenedores amarillos (para envases de plástico, madera, metálicos y briks) y 10.523 azules (para envases de papel y cartón) que hay en las calles.
En concreto, cada extremeño separó a lo largo del año, de media, 15,2 kilos en el contenedor azul (+1,6 %) y 14 de en el contenedor amarillo (+2,1%).
