El sindicato USO ha asegurado que la Junta de Extremadura prepara un "despido masivo" a finales de junio para el colectivo de ATE-Cuidadores que prestan servicios en los centros educativos públicos de Extremadura atendiendo a los alumnos con necesidades especiales.
Un colectivo formado por unos 370 trabajadores a quien la Junta mantienen un "empleo precario", con reducciones de jornada al 80% y con contratos al 80% de la anualidad, de tal modo que "son despedidos en los meses de julio y agosto teniendo que pasar a cobrar el subsidio por desempleo", para posteriormente volver a ser contratados en septiembre
Asimismo, se da la circunstancia de que 38 de ellos han aprobado una plaza fija por oposición libre y que al pasar a trabajar a la administración se encuentran que "su salario mensual no llega al salario mínimo interprofesional".
Según las cifras aportadas por el sindicato este jueves en una rueda de prensa en Mérida, y n trabajador ATE-Cuidador con 10 años cotizados, con trienios y carrera profesional está cobrando alrededor de 1.100 euros mensuales.
Trabajar al 80% de la jornada laboral y al 80% de la anualidad implica una "doble reducción difícil de sobrellevar", pues supone merma en la cotización, afecta a las futuras pensiones; trienios y carrera profesional reducidos; obligación de prestar siempre en la declaración de la renta segundo pagador, entre otras desventajas.
Este sindicato viene solicitando desde junio de 2023 una reunión de la Mesa Técnica de forma reiterada, pero esta sigue sin convocarse y las últimas informaciones fijan la fecha para después de verano. "Es una situación insostenible", señalan desde USO, que ha comenzado una recogida de firmas para instar a la Administración a dar solución convirtiendo las plazas al 100% de la jornada y al 100% de la anualidad, garantizando "un trabajo digno y con retribuciones justas". Si la situación se mantiene, no se descartan movilizaciones al inicio del curso escolar 2024- 2025.
Por otro lado, desde el sindicato se han hecho eco del sentir de numerosos aspirantes de las últimas oposiciones realizadas de los concurso-oposición de estabilización de la Junta de Extremadura, de categorías tan dispares como, TEIs, cocineros, auxiliares de enfermería y peones especialistas agrarios, por su "decepción e impotencia" tras comprobar "una vez más" que se les "desprecia y minusvalora", al recoger en sus pruebas teóricas preguntas "muy por encima del nivel exigido en cada categoría".
