El Tribunal Superior de Justicia de Extremadura ha dictado un auto en el que declara que no existe obstáculo para que la Junta ejecute su plan de derribo parcial del complejo Marina Isla de Vadecañas que contempla la demolición de los edificios sin uso y a medio construir, como el segundo hotel, viviendas terminadas que sirven de oficina a la promotora y el piso piloto. También implica la revegetación de toda la zona, las medidas de vigilancia ambiental, la puesta en funcionamiento de las depuradoras o la señalización e información sobre la Zona Especial Protegida de Aves, entre otras. La Administración regional plantea medio centenar de actuaciones que se desarrollarían durante 35 meses.
Contra este auto cabe recurso de reposición, según señala el Tribunal Superior de Justicia de Extremadura.