Prudencia. Tanto la mostrada por Inés Rey en Más de Uno A Coruña, con motivo del XV aniversario de la elección de la Torre de Hércules como patrimonio de la Humanidad, efémeride que celebramos hoy en la explanada de la Torre.
Y prudencia, la mostrada por el concejal de Promoción Económica de A Coruña, Gonzalo Castro, alma mater de la candidatura de A Coruña, y por consiguiente, de Riazor, como una de las sedes españolas para el Mundial 2030. Tras el aplazamiento la semana pasada de la cumbre entre la Federación Española y el Consejo Superior de Deportes por la candidatura de Valencia, ayer se celebró la esperada reunión. Y ahí, A Coruña pasó el corte. Solo falta la ratificación definitiva de FIFA.
Ahora toca el antes para llegar al Mundial 2030 en plenitud de condiciones de cara a la gran reforma de Riazor. Pero Gonzalo Castro también destaca el día después, el tiempo después para Riazor. "Es un proyecto sostenible, de ciudad, que se va a basar en una cuestión que fue decisiva, la sostenibilidad del propio proyecto", apuntó Gonzalo Castro.
Además, "tiene que quedar un legado, un día después del Mundial, en el que una inversión de este niven genere un valor añadido en la ciudad. Hemos presentado un proyecto de ciudad para acoger un evento así. Y en cuanto a Riazor, tiene que aportar una globalidad de sinergias económicas. El proyecto de Riazor para 2030 pretende convertir un recinto deportivo en uno multiusos, con eventos culturales y otros de gran multitud a nivel de noroeste de España. Y eso fue bien visto por la Federación Española de Fútbol, porque va más allá de un evento meramente deportivo. Hay un proyecto de ciudad y un proyecto de generación de riqueza, social, económica y de transformación de ciudad".
Y por eso recalcaba que la dimensión global de un Mundial hoy en día va más allá de lo que supuso el Mundial 82. Es más, comparó lo qué supone ahora el Mundial 2030 para A Coruña con lo qué supusieron los Juegos Olímpicos para Barcelona en el año 1992.
Mañana habrá reunión en Marruecos, con la participación de las representaciones marroquí, española y portuguesa ante FIFA. No está claro que se decidan ya definitivamente las sedes. Aún habría tiempo hasta el 31 de julio, pero Riazor tiene el 99,99% de posibilidades de acoger el Mundial 2030.