Los asuntos económicos centraron la actividad de este viernes en la Diputación. La presidenta Carmela Silva, y el vicepresidente César Mosquera, presentaron este aumento que experimenta el presupuesto de la institución provincial. Inicialmente, se había aprobado unas cuentas de 164 millones de euros. Con este incremento las cuentas de la institución provincial superarán los 200 millones.
En principio, esta cantidad de 47,2 da vida un plan de reactivación con dos programas diferenciados: Reacpont diputación y Reacpont concellos. El primero se lleva 27,2 millones de euros y el segundo 20. Carmela Silva asegura que esta decisión solo pretende recuperar la vitalidad económica de la gozaba en el periodo pre pandemia la provincia de Pontevedra.
La partida destinada a proyectos propios de la diputación se focalizará en recuperar medioambientalmente la zona del parque de maquinaria, la unión subterránea del Museo o potenciar el Plan Revitaliza, el plan de compostaje de la Diputación. Para Cesareo Mosquera, la experiencia registrada en años anteriores permite "avanzar en plan de compostaje provincial".
Para llevar a cabo esta línea de acción económica, el gobierno de la institución provincial ha decidido recurrir a un endeudamiento de 20 millones de euros, concretamente la partida destinada los municipios de menos de 20.000 habitantes de la provincia. Según las dos cabezas visibles del gobierno de la institución, la cifra se puede asumir y no será complejo regresar a los números negros en futuros ejercicios, haciendo ajustes en el presupuesto.