Tras dos décadas de intenso trabajo y dedicación, el Patronato de la Fundación Santiago Centro ha anunciado la disolución del Centro Comercial Abierto
del Ensanche compostelano. Esta decisión, largamente meditada, se produce tras constatar la
inexistencia de relevo y, para el Patronato, es un claro reflejo de la necesidad de replantear el futuro
del comercio urbano.
El presidente del Patronato, José María Fernández, expuso anoche a la asamblea de asociados las
razones que abocan a esta decisión. El cierre no se produce por problemas económicos, ya que la
Fundación Santiago Centro es solvente y cierra con sus cuentas saneadas. Sin embargo, según expuso
Fernández, el modelo tradicional de asociaciones de comerciantes, diseñado para un contexto
económico y social muy diferente, ha quedado obsoleto frente a los múltiples retos a los que se
enfrenta el comercio independiente, como la falta de relevo generacional, el auge de las franquicias y
grandes cadenas, las compras online y la falta de iniciativas de calado.
La decisión surge de la convicción de que el futuro del comercio en los centros urbanos debe
abordarse de manera distinta para evitar que el centro de las ciudades se convierta en simples réplicas
unas de otras, dominadas por cadenas y franquicias que no aportan valor, singularidad ni valor
diferencial. Por ello, afirmó el presidente, lo más honesto es reconocer que los modelos tradicionales
ya no son suficientes para enfrentar los retos del presente.
Para Chema Fernández, es necesario construir un modelo que no solo busque la “supervivencia” del
comercio local, sino que apoye su transformación y lo convierta en un motor clave para el desarrollo
económico, vecinal y cultural del Ensanche. Durante los dos últimos años, se ha trabajado en una
transformación de Santiago Centro hacia una oficina de servicios orientada atraer nuevas marcas al
Ensanche y fomentar la especialización del comercio. A pesar del intento, destacó, esta estrategia no
prosperó debido a la falta del apoyo necesario para materializarla.
Una llamada a la reflexión sobre el futuro del comercio urbano
El Patronato de la Fundación subraya que el cierre supone una llamada a la reflexión profunda sobre
cómo revitalizar el comercio independiente. "Creemos firmemente que las ciudades pierden su
esencia sin un comercio local fuerte. Es necesario construir estructuras renovadas que permitan
enfrentar los desafíos del presente y garantizar la sostenibilidad futura", señaló José María Fernández.
No se duda de que el modelo de los centros comerciales abiertos pueda ser efectivo en ciudades
pequeñas, añadió, pero resultan insuficientes en entornos urbanos como el del Ensanche, que luchan
contra la competencia de franquicias, cadenas, centros comerciales y plataformas digitales. Para el
Patronato, el modelo de los CCA, aunque ambicioso en sus inicios, fue perdiendo impacto, recursos y capacidad de transformación, asimilándose progresivamente a las asociaciones tradicionales que
pretendían sustituir.
Una historia de innovación y compromiso
Desde su creación, Santiago Centro ha liderado numerosos proyectos que han contribuido a la
dinamización comercial y cultural del Ensanche compostelano. Entre ellos, destacan iniciativas de
digitalización del sector, como la creación de un outlet virtual y una app de fidelización, Santiago
Centro VIP. La Fundación apostó en los últimos tiempos por la y la dinamización vecinal cultura como
ejes de promoción del barrio, con proyectos exitosos e innovadores como Pasearte, Compostela
Photo, mercados de artesanía y productos ecológicos, o carpas navideñas infantiles. Además,
Santiago Centro se ha caracterizado por la organización de toda clase de eventos de dinamización
comercial y vecinal, como marchas ciclistas, desfiles de moda en las calles, campañas de promoción
comercial y mejoras en la iluminación navideña. Todas estas actividades se enmarcaron en una línea
de planificación estratégica a largo plazo, cristalizada en el diseño de una Hoja de Ruta para el
Ensanche con propuestas transformadoras que, sin embargo, no obtuvieron el respaldo esperado.
A pesar de los logros, para el Patronato, la orientación actual de los apoyos a los CCA ha limitado la
capacidad de la Fundación para desarrollar iniciativas de impacto estructural, esenciales para
garantizar la competitividad del comercio local en un entorno urbano cambiante.
Un legado de colaboración y respeto
A lo largo de su trayectoria, Santiago Centro mantuvo una colaboración constructiva con las
administraciones públicas y entidades privadas, evitando confrontaciones y trabajando siempre desde
el respeto mutuo.
Como presidente del Patronato, Fernández expresó su gratitud a todas las administraciones,
asociados y colaboradores que han acompañado a la Fundación en estos 20 años. “A pesar de todos
sus problemas de envejecimiento de la población y de movilidad, seguimos confiamos plenamente en
el potencial del Ensanche como centro de compras y ocio, que es lo que en su día nos impulsó a
involucrarnos en Santiago Centro. Personalmente, me voy con la tranquilidad de haber intentado
aportar mi visión sobre el comercio tradicional como eje fundamental del desarrollo de los centros
urbanos, y seguiré trabajando por el comercio y la empresa desde el Club Financiero”.