Los bomberos han tenido mucho trabajo durante esta pasada noche, fundamentalmente para retirar árboles caídos y también algún letrero luminoso. No ha habido que lamentar más daños que los materiales. Se han suspendido desde ayer por la tarde los trenes que unen Vigo con Ourense y también el transporte de ría. El Ayuntamiento también cerró los cementerios a las cuatro de la tarde en lugar de a las seis y media, tal y como estaba previsto inicialmente.
Las previsiones señalan que los fuertes vientos irán remitiendo según transcurra la jornada y quedará un jueves de chubascos que tendrán continuidad tanto el viernes como el sábado
