La factoría viguesa del grupo Stellantis vuelve a parar sus dos líneas de producción. Durante el turno de noche de este miércoles y los de mañana, jueves. El motivo, una vez más, la falta de microchips, que viene lastrando el buen comportamiento de la planta desde hace varios meses. Esta situación también afecta a las industrias auxiliares. El secretario general de ASIME, Enrique Mallón, ha confirmado en Onda Cero Vigo, que se espera que esta situación se prolongue durante los próximos meses, su diagnóstico coincide con el de los responsables del sector de la automoción. De extenderse más allá del verano, no se descarta que pueda tener afectación no ya en formas de EREs, sino con la destrucción de empleo, aunque confirma que es complicado calcular cuántos trabajadores podrían verse afectados.