Agentes de la Policía Local encontraron el viernes el cadáver de una mujer de unos 90 años de edad con el que convivía su hija desde hacía unos meses en un domicilio en Vigo, Galicia.
Según confirman fuentes oficiales, un vecino fue el que dio el aviso a la Policía porque llevaba meses sin ver a la mujer.
La investigación de este suceso ha pasado a manos de la Policía Nacional
La Policía se personó en la vivienda y la hija les abrió la puerta. Una vez consiguieron acceder al interior, comprobaron cómo el cadáver de la nonagenaria estaba tendido en la cama en avanzado estado de descomposición. La Policía Local dio aviso al Juzgado de Guardia para proceder al levantamiento del cadáver, para ser sometido a una autopsia, así como al personal de Urxencias Sanitarias-061 para que atendiese también a la hija de la fallecida.
La mujer negaba la muerte de su madre
La mujer señaló que su madre se encontraba mal desde hacía unos meses y relacionó su estado con unas empanadillas. La comida, cuya factura del pasado mes de noviembre de 2021 mostró a los agentes, todavía se encontraba en estado putrefacto en la vivienda. Además, explicó que le daba purés y algunas bebidas como infusiones.
La mujer negaba la muerte de su madre y aseguraba que seguía cuidando de ella, por lo que fue derivada a Psiquiatría del Hospital Álvaro Cunqueiro para su valoración. La investigación de este suceso ha pasado a manos de la Policía Nacional.
Serán los forenses los que determinen cuánto tiempo llevaba muerta la mujer, aunque una primera valoración apuntaría a, como mínimo, entre cuatro y seis meses.