El Real Murcia vuelve a la competición. Será el próximo sábado en el Enrique Roca. Con casi 9.000 abonados ya por parte del club pimentonero, los chicos de Mario Simón esperan sentirse arropados en el primer partido del Murcia en Primera RFEF. Con futbolistas como Pedro León o Miku, los granas no piensan en otra cosa que luchar por el ascenso al fútbol profesional. Para ello les visita el Calahorra, un club de los más modestos del grupo. Los riojanos cumplen una nueva temporada en Primera Federación y para ello necesitan un último empujón de la masa social de la ciudad. Ahora mismo cuentan con 700 socios, menos de los previstos.
Mientras el Real Murcia roza los 9.000 abonados, el Calahorra tiene 700
En la entidad preparan el centenario para la próxima campaña, aunque primero deberán resistir en la presente para poder celebrar en el futuro. Con el cambio de grupo sufrido dentro de la categoría, el Calahorra considera que le espera una temporada difícil donde el objetivo será buscar la permanencia.
Muchas piezas nuevas en el vestuario, la mayoría cedidos o de Segunda Federación
Cuentan con una plantilla renovada en casi todos los puntos. Juan García Acedo, el nuevo técnico, solo cuenta con cuatro piezas de la 2021-22. La gran mayoría de jugadores vienen cedidos o fichajes directos de la Segunda Federación, así que son objetivos contrapuestos a los pimentoneros.
Para el estreno la gente no es precisamente optimista con lo que pueda pasar en la visita al estadio de un equipo histórico. Javier Losantos, periodista de Onda Cero en Calahorra, afirma que entre aficionados se deja caer la frase de que "perder por cuatro goles no extrañaría", aunque sin embargo los calagurritanos viajan a la capital del segura sin nada que perder.