Las escuelas infantiles privadas de 0 a 3 años ven peligrar su futuro. No tienen instrucciones ni fechas para su reapertura y la administración se pasa la pelota de un departamento a otro.
Unas escuelas infantiles privadas que abarcan una oferta al que las públicas no llegan, según explica Beatriz Esquisabel, propietaria de dos de ellas y miembro de la Asociación de Guarderías. Abarcan el 30% de los usuarios de Navarra y muchas de ellas se verán abocadas al cierre definitivo.
Los centros están cerrados desde el pasado 14 de marzo, se ha dejado de cobrar a las familias, pero se tiene que hacer frente a los gastos. Son muchas las puertas de la administración que han tocado, piden ayudas de forma urgente.
El lunes que viene Navarra pasa a la fase 2, y lo único que saben es que no pueden abrir. Además, no entienden cómo no se les permite reanudar la actividad, mientras que piscinas y parques infantiles sí lo van a hacer.