La Cámara de Comptos recomienda que Parquenasa, la empresa que gestiona el parque Sendaviva de Arguedas, se convierta en una sociedad pública. Una explicación que se incluye en un informe realizado por la Cámara a petición del grupo parlamentario EH Bildu.
El informe concluye que "desde 2005 hasta la venta de las acciones de Sodena a Nicdo, las únicas aportaciones a Parquenasa las ha hecho Sodena y suman 83,4 millones". Cuatro millones los aportó como participación del 45% del capital social y 79,3 en concepto de préstamos. A 30 de junio de este año, la deuda de Parquenasa con Sodena era de 79,4 millones, de los que 72 debería devolverlos en los próximos cuatro años. La Cámara de Comptos considera "altamente improbable" que dichos préstamos puedan ser devueltos.
PARADOJA Y VIABILIDAD
El órgano fiscalizador apunta la "paradoja" que se da en esta empresa. Se trata de una sociedad privada, ya que el socio público es minoritario. Sin embargo, "es el único que la financia y asume los riesgos".
Así, pide analizar la "viabilidad" de Parquenasa como sociedad mercantil privada, "ante su permanente y estructural situación deficitaria y la improbable captación de financiación privada". En este sentido, recomienda su conversión en sociedad pública.
Parquenasa se creó en noviembre de 2001 como empresa privada. Participaron en su creación la sociedad pública Sodena, con un 45% de sus acciones, y cuatro socios privados: Parque de Atracciones Turismo y Actividades lúdicas internacional S.L. (25%), Grupo Corporativo Empresarial de la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Navarra (15%), Construcciones Sanzol S.A. (10%) y Grupo La Información S.A.(5%).
Desde entonces, las transmisiones de acciones se han producido entre empresas del propio grupo empresarial. Ha habido cambios en los socios y en su porcentaje de participación, pero no se han emitido nuevas acciones. La única variación es el valor nominal de las acciones, al haberse realizado dos disminuciones de capital para compensar pérdidas. Así, el capital inicial de nueve millones ha pasado a 1,8 millones.
"DIFICULTADES DE TESORERÍA" DESDE EL INICIO
Desde el inicio de su actividad, Parquenasa ha tenido "dificultades de tesorería". En 2004, "ante la dificultad para lograr financiación bancaria y la negativa de los socios privados a apoyar financieramente el proyecto", el Gobierno de Navarra y Sodena decidieron que fuera la sociedad pública quien asumiera en su totalidad el apoyo financiero y la supervisión de la gestión. La decisión se justificó en "el carácter estratégico de la inversión".
Como consecuencia, se eliminó el Consejo de Administración, sustituido por la figura del administrador único que recayó en Sodena.
A finales de 2014, el Consejo de Administración de Sodena planteó vender Parquenasa. Hubo reuniones con agentes del sector para dicha venta, contemplando también la externalización de la gestión. La conclusión fue que el parque "no era atractivo ante terceros". Además de sus pérdidas, otro factor negativo era la falta de infraestructuras hoteleras en sus alrededores.
En enero de 2020 se presentó un plan de viabilidad para intentar que la empresa pudiera autofinanciarse, algo que no se ha cumplido. La pandemia de la Covid-19 y el incendio que se produjo en el parque en junio de 2022 empeoraron más la situación.
Sodena ha calculado que se necesitarían entre 230.000 y 240.000 visitantes anuales al parque para "equilibrar gastos e ingresos". Es una cifra "lejana de la real, estabilizada en los últimos años en unos 180.000 visitantes", señala Comptos.
Ante las "pocas perspectivas" de venta del parque, Sodena decidió traspasar sus acciones a Nicdo, sociedad pública que gestiona infraestructuras deportivas y culturales púbicas en Navarra, como el Pabellón Arena y Baluarte. La compra venta se tramitó en enero de este año, fijando un precio simbólico de un euro. A partir de entonces, Nicdo tiene un 45% de la sociedad, La Información el 25,71%, Hiscan Patrimonio el 17,86% y Pronaocio S.L.U. el 17,86%.
Este año también se ha cambiado el modelo de financiación pública. Se ha pasado de prestar apoyo a través de préstamos a financiar la sociedad con subvenciones a fondo perdido, en régimen de concesión directa. En concreto, el Departamento de Cultura tiene este año consignada una partida al efecto de 5,8 millones.