Se trata de un síndrome que puede darse en algunas personas que han superado la enfermedad del coronavirus y que consiste en la persistencia de síntomas de la Covid-19 a partir de la tercera o la cuarta semana tras la infección inicial, o también, por la aparición de síntomas después de un tiempo sin ellos.
Covid persistente: Estos son algunos de los factores que podrían predecir su desarrollo
Dificultad para respirar, cansancio extremo, dolor muscular, cefalea, trastornos digestivos, dificultad para concentrarse y fallos de memoria… Son algunas de las secuelas,de las más de doscientas que se han identificado, del llamado Covid persistente.
La OMS define el Covid prolongado o persistente como "la condición que ocurre en individuos con antecedentes de infección por SARS-CoV-2, generalmente tres meses después del inicio, con síntomas que duran al menos dos meses y no pueden explicarse con un diagnóstico alternativo".
Se trata de una enfermedad derivada el coronavirus que, según la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG),padecen aproximadamente un 15 por ciento de los pacientes adultos contagiados por la Covid-19, y entre un 5 y un 10 por ciento de los niños que han pasado la enfermedad, de acuerdo al último informe epidemiológico de Sanidad. Cifras preocupantes sobre todo en el panorama actual, donde la variante Ómicron ha disparado las cifras de contagio en todo el mundo.
Factores que anticipan el desarrollo de Covid persistente
Estos datos reflejan que una parte significativa de la sociedad sufre secuelas post agudas de COVID-19 (PASC). Investigadores del Institute for Systems Biology (ISB), en Estados Unidos, han identificado varios factores que se pueden medir en el punto inicial del diagnóstico de Covid-19 que anticipan la probabilidad de que un paciente desarrolle Covid persistente, que según algunas estimaciones podría afectar al 40 por ciento de los pacientes.
Los síntomas de PASC incluyen fatiga, confusión mental, pérdida del gusto y el olfato, dificultad para respirar y más. Los factores 'PASC' que han descubierto los investigadores son la presencia de ciertos autoanticuerpos, diabetes tipo 2 preexistente, niveles de ARN del SARS-CoV-2 en la sangre y niveles de ADN del virus de Epstein-Barr en la sangre.
"Identificar estos factores PASC es un gran paso adelante no solo para comprender el COVID prolongado y tratarlo potencialmente, sino también qué pacientes tienen mayor riesgo de desarrollar afecciones crónicas", ha señalado el presidente de ISB, el doctor Jim Heath, coautor correspondiente del trabajo.
"Estos hallazgos también nos están ayudando a enmarcar nuestro pensamiento en torno a otras afecciones crónicas, como el síndrome de Lyme posagudo, por ejemplo", señala el investigador, quien publicará este estudio en 'Cell'. Además, los investigadores encontraron que los casos leves de COVID-19, no solo los casos graves, se asocian con una COVID prolongada.