La Mesa de los Pirineos insta al Gobierno a atajar con celeridad la reforma del mapa local para dotarles de herramientas, que la Ley de Despoblación sea una realidad y ponen el acento en el problema de la educación y el transporte en sus valles.
“El Pirineo sigue vivo”, es uno de los principales mensajes que deja la Mesa de los Pirineos después de comparecer en comisión parlamentaria para hacer un análisis de situación. Ven positivo el “modelo de gobernanza conjunta”, así lo ha recalcado Leire Remiro, miembro de la Comisión Permanente y alcaldesa de Erro, pero creen que es el momento de dar pasos firmes para “paliar unas problemáticas muy dispersas y diversas”.
La Mesa de los Pirineos demanda también una "ventanilla única" para relacionarse administrativamente con el Gobierno de Navarra. Entienden que debe trabajarse, no tanto desde la igualdad, como desde “la equidad”, ya que las zonas del Pirineo “son diferentes en muchos aspectos”. Además, Remiro cree que debe abordarse también la “escasez de vivienda” y “el problema de las escuelas y la educación posobligatoria”.
Sin fecha para una próxima comisión, el siguiente encuentro será en tierras pirenaicas.
