La Guardia Civil de Navarra investiga a un varón de 44 años en Cintruénigo por un delito contra la salud pública y contra la propiedad industrial por vender aceite de oliva virgen como aceite virgen extra y sin reunir las condiciones sanitarias adecuadas.
Según han informado desde la Guardia Civil, el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) recibió una denuncia en la que se informaba que en la localidad de Cintruénigo existía un local que vendía supuesto aceite de oliva virgen extra sin etiquetado y en unas condiciones higiénico sanitarias "deficientes".
Agentes de Seprona se personaron en el establecimiento y realizaron una inspección con el fin de verificar los hechos. En la inspección se contabilizaron todos los envases, tanto vacíos como llenos, y se recogieron muestras de aceite con el que comercializaba el propietario.
Se contabilizaron un total de 1048 envases llenos y vacíos, de 5 y de 25 litros, que en la mayoría de los casos habían sido reutilizados. En el local se localizó una zona de 'lavado' con un fregadero donde el propietario reutilizaba los envases lavándolos a mano.
En otro punto del establecimiento, los agentes del Seprona localizaron un deposito con mil litros de aceite del que se recogieron muestras. El depósito contaba en su parte superior con dos grandes cavidades abiertas, por donde podían entrar a su interior múltiples impurezas, insectos y suciedad, que podía corromper el aceite que se encontraba dentro, por lo que "se trataba de una evidente falta de pulcritud, cuidado e higiene".
Las muestras de aceite obtenías tanto en el depósito de aceite como en diferentes garrafas fueron entregadas en el Laboratorio Enológico del Departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente del Gobierno de Navarra con el objetivo de conocer si todas las muestras son de aceite de oliva virgen.
Los análisis determinaron que se trataba de aceite de oliva virgen pero no Denominación de Origen de Navarra, debido al porcentaje de ácido oleico detectado.
Por estos hechos, la investigación de Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) determinó que el investigado se dedicaba a la venta de aceite de oliva virgen sin ningún tipo de etiquetado y sin control sanitario ni de trazabilidad, por lo que se le considera autor de un delito contra la salud pública y contra la propiedad industrial -por vender aceite de oliva virgen como aceite virgen extra-.