Liga Asobal | Helvetia Anaitasuna

Oleg Kisselev: "Tenemos que recuperar la regularidad en el juego"

El lateral izquierdo de Helvetia Anaitasuna, hijo del mítico Oleg Kisselev, desgrana la marcha del equipo en la liga.

Javier Saralegui

Pamplona / Iruña |

Oleg Kisselev (Santander, 20-8-1997) está en su segunda etapa como jugador de Helvetia Anaitasuna. Después de formarse en el club navarro emprendió una carrera que le ha llevado a Asturias, León y La Rioja, donde jugó con Nava, Ademar y Logroño respectivamente, antes de regresar a Pamplona, su casa, después de recuperarse de una rotura incompleta del ligamento cruzado anterior con afectación del lateral externo.

Tenemos que ser regulares los 60 minutos

Ahora forma parte de nuevo de una plantilla que este año no quiere resucitar viejos fantasmas de las derrotas por un solo gol de diferencia que le condenaron a sufrir hace tres temporadas. De momento Helvetia Anaitasuna ha ganado dos partidos, empatado otro y perdido seis, tres de ellos por la mínima. Oleg Kisselev achaca parte del problema a "la irregularidad que estamos mostrando en el nivel del juego. Tenemos ciertos apagones a veces a principio de la segunda parte, a veces a mitad de la segunda parte... nos entra el pánico o no sabemos rematar la faena cuando tenemos una buena ventaja para ganar, y eso nos penaliza, tenemos que recuperar el nivel de antes de juego. Tenemos que mejorar en la regularidad, mantener los 60 minutos, aparte de mejorar errores".

Mi padre ha visto que es mejor no darme consejos de balonmano

Kisselev viene de una familia de jugadores de balonmano. Su hermano Slava ya ha terminado su carrera deportiva y su padre Oleg fue un mítico defensor del mejor Portland San Antonio desde 1997 a 2004. Allí en la pista del Pabellón Universitario vieron sus primeros partidos los Kisselev junto a Melvin Richardson, hijo de Jackson Richardson y actual jugador del FC Barcelona. Oleg hijo nos pone al día de la vida de Oleg padre: "Hasta ahora ha estado entrenando a equipos de base en Anaitasuna. Este año ha decidido descansar un poco. Como siempre, en Pamplona, está establecido aquí". El padre ya no le da consejos al hijo: "Al principio me daba más consejos, con el tiempo ha decidido que es mejor no hablarme demasiado de balonmano porque no siempre me lo tomo bien (ríe) así que mejor no hablar mucho de ello". "Mi padre dice que nos parecemos en el aspecto de la concentración, aparte de la forma de andar, los gestos, la forma de correr... y yo también soy jugador defensivo".