Las listas de espera siguen siendo el talón de Aquiles de la sanidad navarra. El consejero de Salud, Fernando Domínguez, cuyo máximo reto desde que asumió el cargo es lograr rebajarlas, ha hecho un llamamiento en el Parlamento a todas las partes implicadas para caminar en la misma dirección y avanzar en su reducción.
Reconoce que los datos vuelven a ser "malos" y que no se está logrando que "se operativicen las decisiones". De cara a atajar estas cifras se van a implementar una serie de medidas, entre las que se encuentra penalizar a quienes no acudan a la cita con el médico o cancelen dos citas sin justificación alguna. perdiendo el derecho de garantías y saliendo del registro.
Crecen las cifras
Durante el pasado mes de marzo han aumentado en cerca de un millar las consultas pendientes, que superan ya las 67600, y los dos meses y medio de demora media. Las intervenciones quirúrgicas tampoco van a la zaga con 81 días de espera y 8758 operaciones pendientes.
En línea con lo dicho hace una semana en la entrevista que realizamos en Onda Cero el consejero de Salud no ha ocultado su "tremendo enfado" por el aumento de las cifras. Reconoce que se están dando "fallos" y aboga por un mayor " control de las agendas y citaciones, en imponer tiempos concretos o en el control de las vacaciones" para que no se queden los servicios en cuadro.
Rebajar 1000 pacientes
A pesar de los malos resultados el consejero de Salud, Fernando Domínguez, confía en cumplir su compromiso de bajar la lista de espera en "1.000 pacientes de media por mes". Una comparecencia en las que los grupos políticos han pedido al consejero que se emplee a fondo en corregir estas cifras y en las que se ha advertido de que las peonadas, o pago de horas extras a los facultativos para reducir estas cifras, tiene efecto rebote.