Una patrulla de la Policía Foral interceptó ayer al conductor de un camión cisterna que septuplicó la tasa de alcoholemia permitida. En las pruebas a las que fue sometido ofreció una concentración de 1.14 miligramos por litro de aire espirado. Esta cifra multiplica por siete la tasa legal permitida para los conductores de estos vehículos, que es de 0.15 miligramos, lo que llevó a la imputación del conductor por un presunto delito contra la seguridad vial.
Su propia empresa llamó a la Policía Foral
En Onda Cero, Mikel Santamaría, portavoz de la Policía Foral, señala que la patrulla de tráfico interceptó en la carretera NA-160, que une Tudela con Corella, el vehículo, que transportaba aceite, conducido por un vecino de Sevilla, después de que su propia empresa avisara de que iba a coger el vehículo en estado de embriaguez, sin que lograran impedirlo. El camión fue inmovilizado y su conductor será citado para juicio rápido en el Juzgado de Tudela.
Las patrullas de Policía Foral imputaron también ayer a otro conductor por negarse a someterse a las pruebas de detección de alcohol en aire espirado. Además, inmovilizaron dos vehículos en Tudela y Marcilla por positivos en drogas de sus conductores.
En cuanto a seguridad ciudadana, detuvieron a tres personas por distintos delitos: en Tudela a un varón por un delito de quebrantamiento de medida judicial y a otro por uno de violencia de género y en Monteagudo a una persona con una orden de ingreso en prisión pendiente.