Ripagaina/Erripagaña es "un barrio de Navarra", pertenece a Pamplona, Burlada, Huarte y Valle de Egüés, cuatro gobiernos municipales y, otro más, el Foral, que tienen a esta "criatura", que ya se acerca a los 20 años de vida, y sin las necesidades básicas cubiertas.
"Falta todo, estamos cerca de Estella en población, ¿cómo funcionarían sin estos servicios?"
Juan Luis es vecino de este "peculiar barrio", quien al ser preguntado por una definición se ríe. "Es un barrio que se lanzó en el año 2004, cuando se decidió una edificación para entonces que casi se ha duplicado", explica.
Con 13.500 habitantes, va camino de los 17.000, cifra que cree que se alcanzará en un plazo corto de tiempo. De ellos, aproximadamente 5.000 tienen menos de 16 años.
Cuatro ayuntamientos que tienen que ponerse de acuerdo, con sus propios presupuestos y procesos de participación, a los que se suma una quinta pata, el Gobierno de Navarra. Del ejecutivo foral depende la llegada de dotaciones como el Centro de Salud, por ejemplo.
La solución más directa parece que uno de los cuatro municipios de entre Pamplona, Burlada, Huarte y Valle de Egüés, asuma como propio a Ripagaina. En este caso, Pamplona y Burlada están estudiándolo, tal y como ha explicado Juan Luis, aunque afirma que no deja de ser duro, como habitante, ver que el futuro del barrio dependa de la "viabilidad" que una localidad u otra vean en la adquisición de esta población. Pamplona parece que "parte con más posibilidades", pero la espera no deja de ser desesperante.
Ya se han cumplido 100 días de nuevo gobierno en los distintos ayuntamientos, tiempo que consideran "suficiente para ver que las intenciones declaradas en la campaña electoral se llevan a efecto", pero claro, de la promesa electoral al hecho hay un gran trecho. Lo que todo era "voluntad para llegar a acuerdos" antes de las elecciones, ahora se diluye.
"El desgobierno es absoluto, ningún ayuntamiento está comprometido de verdad"
El plan inicial del Gobierno Foral preveía, en principio, un centro de Salud para 2022. Sin embargo, las últimas noticias señalan que este se va a licitar este año, por lo que su realidad está todavía lejos de ser palpable. Ya es octubre y el tiempo corre en contra.
La Escuela Infantil, según las notas oficiales del ejecutivo, debería estar lista para acoger alumnado en el curso 2024-2025, es decir, el próximo curso. Recientemente se ha dado a conocer que "la redacción del proyecto ya está adjudicada", pero todavía no hay constructora y "no se ha puesto una sola piedra". Juan Luis explica en Onda Cero que "la densidad de población en Ripagaina es muy alta y la joven también", motivo por el cual se necesitan las dotaciones ahora.
A estas comentada habría que añadir otras deportivas y culturales con las cuales el barrio no cuenta o están en muy mal estado. El desconcierto es total. Lejos atajar lo urgente está previsto cubrir una cancha de baloncesto y poner en marcha un frontón con pista de Paddle. "Parches de cara a la galería" según dice Juan Luis.
No son pocos los motivos por los que los vecinos aseguran estar cansados, con unas protestas que en los últimos años han ido más, y con una reivindicación también básica, "estar representados en las comisiones, en las reuniones, en las que se habla del futuro de Erripagaña". A fin de cuentas, el barrio tiene cuatro gobiernos municipales distintos y un gobierno foral, pero está absolutamente desgobernado.