'Maixabel' advierte en un rótulo inicial que la historia que vamos a ver «está inspirada en hechos reales, aunque algunos elementos han sido ficcionados». Icíar Bollaín introduce en un par de momentos imágenes extraídas de los noticiarios, como la capilla de Juan Mari Jáuregui, presidida por el cartel del Partido Socialista de Euskadi y Euskadiko Ezkerra, y la lectura del comunicado el 20 de octubre de 2011, en el que tres encapuchados anunciaban que ETA dejaba las armas. También se escucha la voz de Rodríguez Zapatero y de Rajoy. Y la propia Maixabel Lasa aparece en las escenas finales, rompiendo en cierta manera la representación de una ficción que, especialmente en el País Vasco, ningún espectador puede ver sin olvidarse que esta película no es documental, pero todo lo que cuenta es verdad.