Quizá las estrellas que están llegando a San Sebastián no lo sepan, pero la alfombra roja que pisan con zapatos carísimos y vestidos de alta costura y trajes de sastrería ayudará a cientos de personas que en Gipuzkoa siguen pasando hambre, ya que esa moqueta se convertirá en mil bolsas para que el Banco de Alimentos pueda utilizarlas en su labor.
Gracias a una colaboración entre la Diputación Foral de Gipuzkoa y el propio Zinemaldia, la cita cinematográfica contará con 1.840 metros cuadrados de alfombra 100% reciclada y reciclable que lucirá en el tramo que va hasta la entrada del Kursaal y los metros que conectan el Teatro Victoria Eugenia con el Hotel María Cristina.
Un festival en transición verde
El Festival de Cine de San Sebastián es la primera entidad de Gipuzkoa que comenzó a compensar su impacto medioambiental a través del Fondo de Carbono Voluntario, puesto en marcha por la Diputación Foral y de carácter voluntario.
La iniciativa la tomó el festival el año pasado, tras varias ediciones tomando medidas a favor de una movilidad más sostenible, un uso de la energía más adecuado y con materiales reciclados, compensando más de la mitad de sus emisiones, más o menos 3.000 toneladas de CO2, y un valor monetario de 25.000 euros.