La campaña de Osalan, "Desconectar para conectar", tiene como objetivo sensibilizar sobre el derecho a la desconexión digital y la importancia de establecer límites saludables entre la vida profesional y la familiar. Existe el derecho a la desconexión digital para garantizar que las personas trabajadoras puedan desconectar de las herramientas tecnológicas y comunicaciones laborales, sin estar obligadas a responder correos, mensajes o llamadas profesionales fuera de su horario de trabajo. El mensaje invita a respetar y fomentar el tiempo libre, disfrutándolo plenamente sin interferencias laborales. Entre otras cosas, porque promover una desconexión adecuada no solo mejora el bienestar personal, sino que también contribuye a un entorno laboral más eficiente y equilibrado.
Esta campaña es una consecuencia de la que llevó a cabo Osalan el pasado mes de abril en torno al Día Mundial de la Seguridad y Salud en el Trabajo, basada en Digitalan, la calculadora digital desarrollada para medir la salud digital en el trabajo y que arrojó unos resultados que mostraron que muchas personas empleadas debieran contar con protocolos de desconexión digital en sus empresas para no influir en su equilibrio entre el tiempo personal y laboral. En total, 2.419 personas valoraron su salud digital a través de Digitalan, con los siguientes resultados:
489 personas (61,55%) obtuvieron una puntuación que indicaba una salud digital laboral NO ADECUADA.
696 personas (28,77%) se encontraron en la categoría de salud digital POCO ADECUADA.
234 personas (9,67%) obtuvieron una puntuación que reflejaba una salud digital laboral ADECUADA.