Iñigo Díez no lo dudó, y el sábado noche se puso en marcha dirección a Valencia. Una semana después de la dana, Iñigo ha relatado en Más de uno Bizkaia que sigue haciendo falta muchos medios y personal especializado. Asume el cansancio acumulado tras días de trabajo sin descanso para retirar lodo. 'Esto es un vertedero kilométrico', describe, agradecido por otro lado a que les han facilitado dónde dormir.