Fue en abril cuando varias víctimas denunciaron en la Ertzaintza que eran obligadas a ejercer la prostitución en los pisos de la organización o en salidas concertadas a fiestas privadas. Según relataron, les retenían la documentación, el dinero que obtenían de sus servicios y les restringían las salidas, a un máximo de dos horas al día.
La investigación de la policía vasca ha dado como fruto la detención de tres personas por su presunta implicación en la trama. Un hombre ha sido detenido en Errenteria, y otras dos mujeres en Donostia-San Sebastián y Vitoria-Gasteiz. Así mismo, se han practicado cinco entradas y registro en dos viviendas y una peluquería de la capital alavesa y en otra vivienda y una lonja de la capital guipuzcoana, en las que se han localizado diversa documentación, varios ordenadores, datáfonos, dinero en metálico y una pequeña cantidad de droga.
Las cuatro mujeres, de diferentes nacionalidades, víctimas de la organización, han sido liberadas tras los registros practicados en las viviendas de Donostia-San Sebastián y Vitoria-Gasteiz. Una vez liberadas han sido atendidas por ONGs concertadas con Emakunde, dentro del protocolo que esta institución tiene para atender a las víctimas de Trata con fines de explotación sexual.