La vicelehendakari Idoia Mendia ha desgranado las principales novedades y líneas del texto normativo, entre los que ha destacado que se mejora la atención en todas las situaciones vulnerables, hasta un 40% en unidades con menores, y hasta un 17% los pensionistas. Además, ofrece mejor cobertura en el caso de mujeres maltratadas o explotadas, personas con discapacidad, personas refugiadas y víctimas de terrorismo que se vieron forzadas a partir y quieran regresar.
Más de 51.000 personas reciben a día de hoy la Renta de Garantía de Ingresos en Euskadi. La nueva ley, que incorpora también el Ingreso Mínimo Vital, busca también simplificar la gestión de las prestaciones económicas, con una mayor seguridad jurídica y mejorando las herramientas de identificación y control.
Unidades de convivencia
Han sido varios los intentos de reforma de este sistema, que ahora llegará al parlamento con novedades como la eliminación del límite de prestaciones reconocidas por domicilio. Cuando haya más de una unidad de convivencia por domicilio, se aplicará un coeficiente reductor. Se definen unidades de convivencia ordinarias y excepcionales, que pueden llegar a tres años, salvo los pensionistas, que son indefinidas.
El requisito de empadronamiento pasa de tres a dos años en el caso de familias con menores. No deberán estar empadronados previamente ni víctimas del terrorismo ni colectividades en el exterior.
Unidad de control
Recibir la prestación ya no supondrá cumplir "obligaciones difícilmente objetivables" y otras no vinculadas directamente con la prestación, como pueda ser el absentismo escolar o el ejercicio de la mendicidad. Otra de las novedades es que se tendrá en cuenta la conciliación familiar como argumento para el rechazo de una oferta de empleo al beneficiario de la prestación.
Se creará una unidad de inspección en Lanbide para verificar los cumplimientos. En anteproyecto de ley prevé también un sistema que generaliza la pérdida parcial de la prestación, en caso de incumplimientos. La pérdida total o extinción de la prestación se reserva para casos muy concretos. "En un hogar con menores, si los padres incumplen, no les podemos dejar en un absoluto desamparo", ha explicado Idoia Mendia.
“El sistema vasco de protección ha sido nuestra mejor inversión social en los últimos treinta años”, ha afirmado la vicelehendakari Idoia Mendia.