Los magistrados deben analizar si a finales de los 90, durante tres largos años, agredió sexualmente a una de las niñas que entrenaba. Presuntamente, con excusas la llevaba a su casa donde tenían relaciones sexuales sin el consentimiento de la niña. Ella tenía 13 años y no supo- ni pudo hacer frente a la intimidación y al miedo. Por eso, el colectivo feminista de la localidad denuncia que será muy difícil presentar pruebas o demostrar esa coacción.
Cerca de medio centenar de personas han arropado, a pie de calle, a la víctima.
La Fiscalía explica en su escrito que la víctima tuvo a López como entrenador de baloncesto desde los 10 hasta los 16 años. Relata que, desde julio de 1998 -cuando el hombre tenía 31 años y ella 13- y durante tres años, la llevó "bajo excusas" a su casa, donde le agredió sexualmente.
A la menor le infundía "temor" su entrenador, que era "agresivo o desproporcionadamente exigente con ella en los entrenamientos", según el Ministerio público.
La víctima, que fue diagnosticada con trastorno por estrés postraumático y ha necesitado tratamiento psicológico, denunció los hechos en diciembre de 2023 y el club apartó al entonces investigado de las funciones de entrenador para que se dedicara a labores de gestión, aunque finalmente le despidió y tuvo que abonarle una indemnización.
Las sesiones se celebran a puerta cerrada, según la decisión adoptada por la Audiencia vizcaína a petición de la acusación particular -que pide para él 18 años de cárcel-, para garantizar la "intimidad" de la víctima y evitar "la confrontación visual con el acusado".