Según datos de la Ertzaintza, en 2020 1.459 personas menores fueron víctimas de un delito, primando el maltrato o violencia intrafamiliar (657 menores). Cada vez se denuncian más casos de violencia sexual: 159 en 2020 frente a 128 en 2016. La Consejera ha remarcado que “cuando existe denuncia comienza un duro proceso judicial para las víctimas en un entorno no adaptado para la infancia. Un proceso que se puede alargar años y en el que hasta hace poco, se les abocaba a revivir el trauma en sucesivas declaraciones en las que la defensa podía poner en cuestión su testimonio”. Según Save the Children, en torno a un 70% de los casos de violencia sexual que entran en el sistema legal nunca llega a juicio oral.