El ejercicio consiste en imaginarse que YA TENEMOS EL PERRO O EL GATO EN CASA y tras ello responder a cada pregunta señalando la puntuación inferior (de 1 a 5) a mayor acuerdo, mayor puntuación. Al final esta la valoración. Ah! y no vale hacerse trampas al solitario!
Me gusta disfrutar de la compañía de mi perro o gato, le demuestro mi cariño y deseo jugar con él.
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Lo he marcado con el microchip y censado en el Ayuntamiento.
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Si viajo procuro siempre un lugar adecuado donde esté bien atendido hasta mi regreso o me acompaña con la documentación necesaria en regla.
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Siempre recojo sus excrementos en una bolsa, la cierro y la deposito en la basura.
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Solo le doy el tipo de comida y la cantidad adecuados para su salud y bienestar.
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Lo llevo periódicamente al veterinario y le procuro todos los cuidados necesarios.
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Me ocupo de que haga suficiente ejercicio cada día y no lo dejo suelto donde esta prohibido.
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Pido consejo al veterinario para ejercer la tenencia responsable y evitar el nacimiento de camadas no deseadas.
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Procuro en todo momento que no cause molestias a los demás.
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A todos los efectos es un miembro más de la familia y lo cuidaré como tal mientras viva.
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Una vez finalizado el cuestionario, hay que sumar los puntos y ver el significado.
40-50 puntos: Tiene aptitudes para ser un buen propietario. Entiende las responsabilidades que conlleva tener un animal de compañía y está preparado para disfrutar de una feliz convivencia.
30-39 puntos: Es consciente de las responsabilidades que conlleva tener un animal de compañía y desea asumirlas. Necesita un poco más de tiempo (y quizás disfrutar del animal de compañía de un amigo o vecino) hasta estar completamente preparado para tener uno propio.
29 puntos o menos: Debería replantearse seriamente la posibilidad de tener un animal de compañía.