Desde JELO defendemos el consumo de árboles de Navidad de origen natural, una costumbre que favorece el desarrollo de una industria 100% sostenible, estimula la silvicultura, contribuye a la lucha contra el cambio climático (las plantaciones actúan como sumidero de CO2) y favorece el desarrollo de la economía rural. Sin embargo el triste espectáculo de los abetos abandonados en las calles, muchos de ellos todavía vivos, algunos incluso con las bolas y las púrpuras, es un mal ejemplo para todos.
Para evitarlo, en muchas ciudades y pueblos de toda nuestra geografía habilitan éstos días un sistema de recogida selectiva para reciclar esos miles, millones de árboles que hemos comprado: ya sea intentado su replantación en los viveros municipales para incorporarlos al verde urbano o triturándolos para obtener un compost de altísima calidad con el que nutrir los parterres.
Y tu ¿Qué haces con el árbol de Navidad cuando acaban las fiestas? ¿Tienen en marcha algún sistema de recogida en tu localidad? ¿Crees que debería habilitarse un método general para evitar convertir nuestras calles en un cementerio de árboles de Navidad? Nos encantaría recibir tus opiniones, que comentaremos en antena en el próximo programa.