El joven madrileño ha resultado herido a la altura de la ingle izquierda cuando, en el momento del embroque, no se salió de la suerte y, aunque enterró el acero en lo alto del morrillo, el animal lo prendió y lo encunó entre los pitones en lo que fueron unos momentos de tremenda angustia.
Rápidamente se vio que Caballero iba herido de consideración. Se notó en la hemorragia que empezó a brotar de su pierna, en la forma en la que él mismo se taponaba la herida y en la rapidez con la que lo llevaron a la enfermería, donde está siendo intervenido por el equipo que dirige el doctor Máximo García Padrós.
El toro dobló prácticamente sin puntilla, y los tendidos, que había vibrado del valor temerario de Caballero, le pidieron una oreja que el palco acabó concediendo, y que recogió su cuadrilla, que, acto y seguido, se la llevó a su matador a la enfermería.
Debido a este percance el festejo en Las Ventas con motivo del Día de la Hispanidad ha quedado en un mano a mano entre Eugenio de Mora y el venezolano Jesús Enrique Colombo, con toros de la ganadería de Valdefresno.