La novela arranca con dos mujeres de la alta sociedad peruana, casadas, que debido al toque de queda se ven obligadas a pasar una noche juntas. Algo va a ocurrir entre ellas...hasta llegar a un encuentro sexual. Este hecho, afirma Mario Vargas LLosa, es el más claro exponente de lo que la sociedad peruana vivía en aquella época: un férreo control por parte de la dictadura sobre la vida social hasta el punto de que el sexo, se convirtió para muchos en una vía de escape. Pero no es una novela erótica -aclara el autor- sino una narración sobre las miserias de la prensa amarilla, con tintes policiales y con un fondo político fundamental.
El autor de "La tía Julia y el escribidor" o "El sueño del celta" asistirá en París el próximo mes de abril, con motivo de la publicación de su obra en dos tomos en la prestigiosa colección La Pléiade, donde se reúne el canon de la literatura universal. Y a ello se ha referido como uno de los hechos que más satisfacción le produce en toda su carrera, "más que cualquier otra cosa, porque desde joven fui muy afrancesado y aprendí la lengua para leer a los clásicos en La Pléiade. Es lo que me hace más feliz en mi vida como escritor", ha recalcado el autor, que el próximo día 29 cumplirá 80 años.
Mario Vargas Llosa, ha criticado la deriva que, a su juicio, está tomando el periodismo hacia la cultura del espectáculo y ha subrayado que prefiere, "sin duda", formar parte de la prestigiosa colección La Pléiade que ser portada de las revistas del corazón. Aunque últimamente ha estado en el centro de casi todas ellas por su relación personal con Isabel Preysler, Vargas LLosa asegura que a él no le gusta aparecer en este tipo de publicaciones. En 2012 ya publicó un ensayo llamado "La civilización del espectáculo" y ha comentado que, tras sus últimas experiencias con estas revistas llamadas del corazón, quizás retomaría el ensayo para hacer una revisión, "porque es un tema muy importante", ha dicho. "Es un fenómeno -ha argumentado-. Mientras los periódicos caen en picado, ha insistido, estas revistas aumentan su tirada cada semana.