Antonio Machado murió de pena, alejado de su Sevilla natal y de su amada Soria; y sin que su amor por Guiomar pudiera ser correspondido. Esto es parte de la obra de Ian Gibson ‘Los últimos caminos de Machado’ (Editorial Espasa) basada en Colliure.
Colliure, esta localidad francesa es la que le vio morir a él y a su madre. Es donde desde hace ocho décadas reposan los restos del poeta español.