'EL LATINO DE LA TIERRA'

Luz Gabás: "Si anhelas el primer amor, ¿qué has hecho con tu vida? Qué desperdicio"

Luz Gabás (Monzón, Huesca, 1968) regresa al panorama literario este otoño, con su nueva novela "El latido de la tierra" (Planeta). Autora de grándes éxitos como "Palmeras en la nieve", "Regreso a tu piel" y "Fuego en el hielo", esta es la más romántica de las cuatro novelas.

Paco Paniagua

Madrid |

Al mismo tiempo, se trata también de una obra generacional y policíaca por primera vez. La autora se estrena en este género y el lector irá siguiendo la investigación tras la aparición de un cadáver, que llevará a cabo la concienzuda inspectora de la Guardia Civíl, Esther Vargas. Considera Luz Gabás que, además del misterio, la intensa trama que se va creando, ayuda a sus personajes a reflexionar sobre la "inseguridad, la angustia y el miedo".

"El latido de la tierra" es, sobre todo, un homenaje a los nacidos en los años 60 y a quienes luchan por mantener el arraigo de sus raíces. "Un grupo de amigos reunidos tras mucho tiempo. Una mansión anclada en el pasado. Una mujer sacrificada a su legado. Un crimen con una víctima sin identificar, unos nuevos vecinos que llegan para trastocarlo todo. Secretos, mentiras, amores y traiciones. La fidelidad a la familia. Los pecados de los padres que recaen sobre los hijos. Un mundo antiguo que quiere resurgir de sus cenizas".

En la calma de un tranquilo pueblo de la Sierra Negra de Guadalajara, Majaelrayo -de apenas una veintena de habitantes- Luz Gabás nos desgrana los aspectos esenciales de esta novela. La autora eligió este lugar, porque puede ser perfectamente Aquilare, el pueblo imaginario en el que sitúa la narración principal y que según nos dice, nos adentra en el pasado. aunque "sin nostalgia". Es una alegoría con "una sucesión de metáforas sobre el individuo y la soledad, sobre cómo evolucionamos como individuos y la sociedad".

Y también, sobre la huella que deja en nosotros aquél primer amor que siempre viajará no uno mismo. Hay también "bastante" parte autobiográfica, "pero desde mucha distancia". "He buceado en el pozo de mi pasado, he revisado mis propios fantasmas, y creo que mis amigos verán reflejada esa época de juventud", señala.

La música es también muy importante en la novela, cuyos capítulos vienen precedidos por una canción que los completa. La arquitectura narrativa de esta novela cuenta también con "un trabajo más", la música y, sobre todo, el heavy metal y el rock and roll, porque esta escritora es una "mujer madura que escucha a Leño: "Mi verdadero yo es el heavy". Por eso hay temas de Los Suaves, Rolling Stone , Deep Purple, Dover o Asfalto, entre otros.

La protagonsita de "El latido de la tierra", Alira, deberá hacer frente al reto de mantener una mansión familiar -Elegía- frante a las ruinas de pueblo de Auilare, expropiado y abandonado como muchos otros en los años 70. Su mundo consiste en una casa en decadencia que ya no puede mantener, una madre que envejece, un hermano huraño y otro codicioso. Pero en todo este ambiente algo irrespirable, el amor vuelve a ocupar su espacio.