Elena Ferrante es la autora de la tetralogía "L'amica geniale" (2011-2014), que ha cosechado un enorme éxito editorial dentro y fuera de Italia. No obstante, por el momento se desconoce la verdadera identidad de la autora, razón por la que en los últimos tiempos expertos literarios e investigadores han tratado, sin demasiado éxito, de desvelar quién se esconde detrás de semejante éxito editorial. Una investigación dirigida por "Il Sole 24 Ore" punta a que, tras dicho pseudónimo, se encuentra la traductora Anita Raja.
El último intento ha sido del periodista Claudio Gatti, del diario italiano "Il Sole 24 Ore", que ha conducido una investigación publicada además por el alemán "Frankfurter Allgemeine Zeitung", el francés "Mediapart" y por la revista "The New York Review of Books".
Así, Elena Ferrante sería realmente Anita Raja, una traductora nacida en 1953, residente en Roma y cuya madre fue una judía polaca que, tras sobrevivir al Holocausto, se transfirió a Nápoles, donde la autora ambienta sus obras.
Raja está casada con el escritor napolitano Domenico Starnone y desde hace tiempo colabora como traductora de alemán con la casa editorial "E/O", la misma que edita las obras de Ferrante. El diario asegura que Raja, a pesar de ser "una simple traductora", ha recibido en los últimos años grandes sumas de dinero, hasta el punto de que la sitúa como "la principal beneficiaria del éxito comercial de los libros de Ferrante".
En 2014, según la misma fuente, Raja obtuvo ingresos superiores a los tres millones de euros, un 65 % más que en el año anterior, y en 2015 llegó a ganar más de siete millones y medio, un capital con el que Raja y Starnone han comprado varios y lujosos inmuebles en Roma.
La editorial "E/O" ha salido al paso para afirmar que "disgusta ver a una gran autora italiana, amada y celebrada en el país y en el mundo, tratada como si fuera un criminal". "¿De qué delito está manchada para justificar una invasión de su vida de este tipo? ¿A qué superior interés público respondería la investigación del periodista Claudio Gatti y publicada de manera contemporánea en cuatro países?", lamenta la editorial.
Y zanja: "Mucha tinta se ha vertido especulando sobre la identidad de Elena Ferrante, en vez de profundizar en su obra. Y aún mucha más se verterá. Al menos hasta que ciertos periodistas continúen considerando el cotilleo más importante que la obra de la autora".