Las grandes superficies son las únicas que han incrementado sus ventas, en un 1,5%. Sin embargo, tanto las grandes como las pequeñas cadenas han perdido ventas, entre un 0,6% y un 2,9%.
Los bienes no alimenticios son los que más se han dejado de comprar. En cambio, se ha comprado más comida, un 0,1% más.
Por comunidades autónomas, las ventas subieron sobre todo en Baleares y Canarias. En cuanto al empleo, se ha incrementado en todos los modos de distribución, excepto en las pequeñas cadenas que recortaron sus plantillas un 0,3%.
En cambio, las grandes superficies contrataron un 3,1% más.