La Bolsa española ha abierto este lunes con una fuerte caída del 2,57 % que la sitúa por debajo de los 10.400 puntos, después del hundimiento de los mercados asiáticos, entre ellos, el Nikkei de Tokio, que se ha desplomado un 12,4 %, ante el temor a que EE. UU. entre en recesión.
En la apertura, el IBEX 35, el principal selectivo español, cotiza en los 10.385,9 puntos tras dejarse ese 2,57 %. Las ganancias acumuladas en el año se reducen al 2,81 %.
El indicador español podría encadenar este lunes su cuarta caída consecutiva, en un contexto de temor en el mercado a una recesión en EE. UU., lo que podría llevar a la Reserva Federal (Fed) a rebajar más los tipos, mientras, además, se agravan las tensiones geopolíticas entre Israel e Irán.