De continuar esta situación, el sindicato no descarta nuevas convocatorias de paros laborales durante el mes de agosto en Renfe, que podrían extenderse a Adif si las negociaciones en curso sobre movilidad, empleo y externalizaciones siguen bloqueadas.
Según ha subrayado el secretario general del Sector Ferroviario de FSC-CCOO, Manuel Nicolás Taguas, la operadora incumple las tres materias troncales en los que se fundamenta el convenio como son el empleo, jornada y salario.
En este sentido, ha señalado que la renovación, el rejuvenecimiento y el reequilibrio de género en el empleo ferroviario, y la autorización del 105 % de la tasa de reposición, que supondría más contrataciones que jubilaciones y desvinculaciones, queda "tergiversada" por la dirección de Renfe.
Así, el sindicato agrega que el hecho de que no se genere empleo en el Grupo Renfe queda demostrado por los números de la empresa, que el 30 de septiembre de 2018 informó al Comité General de Empresa de que la plantilla era de 13.694 trabajadores, mientras que en agosto de 2017 esa cifra ascendía a 13.723.
"No estamos de acuerdo con esta maniobra. Eso nos lleva a que Renfe no pueda atender, con la debida calidad, el servicio de transporte ferroviario y se incrementen las incidencias en el tráfico ferroviario", ha subrayado.
Por otro lado, CCOO remarca la preocupación del personal ferroviario por el hecho de que Renfe aplique, "de manera unilateral", el acuerdo recogido en el convenio colectivo de reducir la jornada a 37 horas y media de promedio.
"Lo ha hecho a su libre albedrío dando libres los días 24 y 31 de diciembre y reduciendo la jornada en 17 minutos. Eso es una tomadura de pelo a las trabajadoras y trabajadores ferroviarios y no lo vamos a consentir", ha destacado Taguas.
Asimismo, ha apuntado que la convocatoria de huelga también responde al hecho de que no se incluya en la masa salarial, y por tanto no se haga consolidable, el incremento salarial del 0,5 % derivado de la productividad de 2017 y 2018.
CCOO reitera además que mantendrá abierta las vías de dialogo y señala que estas movilizaciones son la última salida contra una gestión que califican de "dictatorial" en las relaciones laborales.