Con la llegada de 2023 también ha entrado en vigor la reforma de las pensiones anunciada por el Gobierno de Pedro Sánchez. A partir de ahora se vinculan las pensiones mínimas a la subida del índice de precios de consumo (IPC),con el objetivo de evitar que los jubilados pierdan poder adquisitivo a causa de la elevada inflación.
Sin embargo, esto hace que los pensionistas que cobraban la conocida como "paguilla de enero", ese dinero extra que se recibía en el primer mes de enero para compensar la subida del IPC, dejen de ingresarlo.
¿Cuánto subirán las pensiones en 2023?
Este año 2023 las pensiones subirán un 8,5% y se verán beneficiadas de ella tanto las pensiones contributivas como las no contributivas.
Por ejemplo, si la pensión media mensual española es de aproximadamente 1.256 euros, gracias a este incremento conforme al IPC del 8,5%, el dinero medio que cobrarán los jubilados es de a los 1.362,76 euros.
¿Cuándo se cobran las pensiones en el mes de enero?
Aunque en la Seguridad Social está establecido que el dinero de las pensiones se cobra a mes vencido, es habitual que las entidades bancarias adelanten este dinero a finales de mes. Es decir, que dependiendo de cada banco se suele ingresar el dinero de la pensión entre los días 22 y 30 de cada mes.
Críticas de los economistas
Por su parte, tanto la oposición como algunos economistas y Bruselas han criticado la subida de las pensiones conforme al IPC, ya que explican que se trata de un sistema que insostenible en el tiempo, especialmente por el incremento en el número de pensionistas y la precariedad del empleo.
Tal y como detalló Kamal Romero, profesor de Economía de la Universidad CEU San Pablo, a Onda Cero, "el sistema de pensiones tal y como esta hoy en día no es sostenible". Según indicó esto es debido a "las desigualdades del sistema de trabajo las reproducen las pensiones" y señaló tres factores que afectaron:
- La alta tasa de paro
- Los salarios bajos
- El número de trabajadores por jubilado, que "en 20-30 años, se va a reducir muchísimo".
Por otro lado, desde Romero también recordó que desde Bruselas ya avisaron de la inestabilidad de este sistema, que finalmente tendrá un coste fiscal negativo.
