Durante la defensa del real decreto ley, el ministro de Economía, Luis de Guindos, ha recordado que la norma establece un nuevo sistema de comisiones de los cajeros más transparente y sencillo, que respeta la inversión y el mantenimiento de la red, y ofrece un servicio más barato a los clientes, que nunca pagarán dos veces por el uso de este servicio.
En concreto, la norma establece que desde el pasado 3 de octubre, cuando entró en vigor, las entidades financieras no podrán cobrar una doble comisión por sacar dinero en efectivo de los cajeros.
Así, las entidades propietarias de los cajeros no podrán cobrar a los clientes de otros bancos cuando retiren efectivo de su red.
No obstante, sí podrán exigir esa comisión al banco al que pertenezca el cliente que saca dinero del cajero, que será quien decidirá si repercutir o no está comisión a su clientes por usar la red de la competencia.
Esto se explica porque el banco propietario del cajero automático empleado por un usuario que no es cliente suyo puede reclamar una tasa de servicio a su competidor por haber facilitado efectivo a sus clientes.
En último caso, es solo ese cargo, y nunca una cantidad superior, el que se podría acabar trasladando íntegramente o en parte al usuario en forma de comisión, cargada directamente por su entidad financiera.