El fondo de reserva de la Seguridad Social cuenta en la actualidad con 8.061,56 millones de euros, una cifra que se sitúa por debajo de los 8.085 millones que tenía a cierre de 2017, debido a que las rentabilidades de los valores en los que está colocado son negativas.
El secretario de Estado de Seguridad Social, Octavio Granado, ha comparecido hoy ante la comisión parlamentaria de Pacto de Toledo, donde ha asegurado que la llamada "hucha de las pensiones" cuenta con "algo más de 8.000 millones de euros".
Granado ha explicado que el fondo de reserva está invertido en activos de deuda pública que tienen una rentabilidad negativa desde mediados de 2017, "equiparable a la que tenía a principios de 2003", por lo que su situación actual "es de todo menos halagüeña".
La cartera de activos que forman parte del fondo de reserva están invertidos exclusivamente en deuda pública española con vencimientos a muy corto plazo, que ha tenido en el último año rentabilidades negativas desde el 0,1% y el 0,4%.
Granado ha atribuido esta política de inversión al anterior Gobierno del PP y ha asegurado que "habría sido posible tener otras previsiones" más "razonables", invirtiendo una parte a largo plazo y otra parte a corto, algo que "habría exigido tener una planificación".
Desde los 67.000 millones de euros que tuvo en el año 2011, tras las aportaciones realizadas durante años, del fondo de reserva se han detraido 74.000 millones para el pago de pensiones, una cuantía mayor de la aportada porque se han ido añadiendo al mismo los rendimientos financieros obtenidos de su colocación en deuda.