La próxima semana se formaliza el acuerdo entre el Gobierno y los agentes sociales, según el cual los menores de 30 años que ni estudien ni trabajen empezarán a cobrar 430 euros al mes.
Para poder acceder a esta ayuda, los jóvenes tendrán que estar apuntados al Sistema de Garantía Juvenil y podrán cobrarla hasta un máximo de 18 meses, cuando accedan a un contrato de formación.
La ministra de Economía, Fátima Báñez, está convencida de que esta medida ayudará a una mejor y más rápida inserción laboral de los jóvenes.
"Para que los jóvenes españoles puedan formarse y trabajar a la vez, con eso conseguiremos seguir dando oportunidades a esos jóvenes que son nuestro futuro, pero que sin duda todos queremos que tengan un presente cuanto antes", ha dicho.
Esta medida, que está pactada con Ciudadanos y presupuestada con 500 millones de euros, es una estrategia para no tener que devolver el dinero que reclama Bruselas por no gastarlo en la Estrategia de Garantía Juvenil.